La
formación académica, requiere, no solo desde lo instrumental, sino también
desde lo transversal, que el estudiante adquiera elementos, hábitos, técnicas, herramientas,
métodos y demás que le permitan empoderarse de la construcción de conocimiento
a través de la relación que tenga con el texto, para que la lectura, escritura y argumentación fruto de
ese proceso de interacción con el texto, sean sobre bases académicas; por esta
razón, “una competencia es un saber hacer flexible que puede actualizarse en
distintos contextos” (Martínez & Álvarez,
2011 p.3). Lo anterior nos remite a que el estudiante debe estar formalmente en
capacidad de desarrollar unas competencias que son necesarias en el mundo
laboral, tales como la interpretación, sustentación y análisis crítico, así ocmo
la redacción coherente y cohesionada. Pero para ello se hace preciso que dicho
abordaje no se realice desde una única asignatura, en un único semestre académico, sino que este pueda darse de
manaera contínua, pues las competencias en lenguaje escrito y verbal son muy
diferentes, por lo que requieren una asimilacion mas profunda por parte del
estudiante, al respecto opinan Martínez & Álvarez:
En el primer y segundo semestres de cada
carrera, los estudiantes deben recibir cursos de comprensión y producción que
los capaciten para un mejor desempeño en sus respectivas áreas de saber; pero,
a la vez, se proponen «horarios corredor» a los que pueden ingresar alumnos de
cualquier área; esta heterogeneidad impide un trabajo centrado en las
disciplinas (Martínez & Álvarez, 2011 p.3).
La búsqueda de estudiantes críticos y autónomos, que sean
ellos quienes se provean el conocimiento, el docenteasumiiendo el papel de
mediador, posibilita una mayor libertad y autonomía por parte del estudiante en
los respectivo a adentrarse en su area de conocimiento. Además, en el contexto
actual, el mundo virtual propone personas autónomas que puedan gerenciarse sus
emprendimientos, comercio, estudio y entretenimiento. Por ello el mundo de las
TICs propone a su vez otra forma de asumir el rol de estudiante, esta vez con
mayor proactividad, “La
información aparece así como el centro de todo, como un elemento que no sólo se
puede poseer, sino que da poder; que otorga autoridad, ventajas…” (Marcano, 2007 p.4). Pero, desde la perspectiva del docente ¿Cómo
opera el asunto?:
La actividad de todos los docentes, no
sólo de los de lengua, deberá estar comprometida en este sentido con todo lo
que implique estar cerca de la información, del conocimiento. Pero, no para
repetir, sino para posibilitar desde su experiencia, desde sus saberes, las
vías para acceder a través de la lectura a toda esa información que
posteriormente dará forma al conocimiento Para brindar a sus estudiantes,
cualquiera sea su nivel de escolaridad, estrategias que les permitan
desarrollar las competencias y habilidades que supone el acto de construir el
significado del texto escrito, más allá del soporte, del empaque en el cual
éste se presente (Marcano, 2007 p.10).
Ante
la anterior perspectiva, debe considerarse que desde ambos lados del proceso
formativo, es decir, quien lo transfiere (el profesor) y quien lo tramita (el
estudiante) existen una serie de recursos de los cuales deben valerse para
poder afrontar las exigencias de la formación en lenguaje y escritura, sobre todo cuando se habla
de educación virtual, donde la comunicación escrita es esencial y esta debe ser
lo más explícita posible pero con la mayor brevedad, es por ello que mediante
el enfoque de formación por competencia se orienta a la adquisición de métodos,
técnicas, estrategias y herramientas que consoliden un proceso autónomo de
aprendizaje que pueda corregir vicios heredados
en la forma cómo asumimos una lectura o abordamos un texto determinado.
Por lo tanto para que nuestros
estudiantes escriban y reescriban productos académicos como ensayos, ponencias
o artículos con concordancia, coherencia, cohesión se debe educar en técnicas
básicas que le permita sintetizar en frases y párrafos precisos lo principal de
un argumento sin dejar de lado las ideas secundarias (resumen), expresar con
sus propias palabras de forma rápida y sencilla lo comprendido (paráfrasis),
citar ideas, opiniones propias de un autor (cita textual) de manera apropiada (Cevallos, Pala, & García, 2018 p.4).
Cabe
recordar que la formación básica en bachilllerato en el tema de lecto escritura
es bastante instrumental y poco o nada profundiza en hacer más practico el
ejrcico de escritura y en profundizar en los niveles de interpretación y
analisis que adquiere de un texto determinado.
En nuestro país, la enseñanza de
lenguaje y todo lo que a ella concierne, se considera dentro del currículo de
Educación General Básica y Bachillerato, pero se ha evidenciado que el perfil
de salida del bachiller es débil, los conocimientos adquiridos son básicos en
gramática, redacción, síntesis…etc., convirtiéndose en una barrera al ingresar
a la educación superior, donde se requiere mayor experiencia en el desarrollo
de escritos, redacciones o trabajos similares, los estudiantes presentan
dificultades, limitaciones para exponer, defender ideas, organizar pensamientos
con claridad, coherencia, cohesión y como ya no se contempla en las
universidades impartir estas herramientas, por necesidad se auto aprende, sin
una debida orientación de los educadores responsables, incluso continua esta
restricción en aquellos que escriben, por lo que la labor conlleva mayor tiempo
y esfuerzo por invertir (Cevallos, Pala, &
García, 2018 p.7).
Es
por ello, que afianzar desde la familia y la escuela, procesos que le permitan
al estudiante tener una relación horizontal con la lectura, el libro, la
escritura y la oralidad como una forma de entender y asimilar de manera más
clara y apropiada los diferentes textos
que se aborden en el entorno académico, permite estar en condiciones de
responder a las exigencias actuales que demandan el desarrollo de habilidades
en el campo de la lectura y escritura no solo como instrumento de su labor
sino como herramienta meta cognitiva que
genera procesos mentales superiores y que permite relacionar todos los aprendizajes
y conocimientos para de esta manera ponerlos en uso mediante el discurso o el
desarrollo de ideas y conceptos propios.
Para
concluir se debe resaltar el valor de la autonomía como elemento fundamental
para el desarrollar el aprendizaje bajo las modalidades virtuales segunda las demanda si exigencias del mudo
laboral y académico actual.
Bibliografía
Cevallos, A. A., Pala, Y. I., & García, J. A.
(2018). ANÁLISIS DE PERTINENCIA DE LASCOMPETENCIAS PARA LA ESCRITURA
ACADÉMICA CON LOS ESTUDIANTES DE LAS CARRERAS DE CIENCIAS EXPERIMENTALES. Boletín
virtual, 16.
Marcano, Y. B. (2007). LA LECTURA:
HERRAMIENTA FUNDAMENTAL PARA LA FORMACIÓN DE LOS FUTUROS DOCENTES EN EL
CONTEXTO DE LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO. LAURUS, 20.
Martínez, Z. C., & Álvarez, G. U.
(2011). Las competencias en escritura académica en la universidad colombiana.
SEDLL. Lenguaje y Textos, 11.