Pizarnick si estuvieras aqui

Si estuvieras aquí

Sí, mujer, aquí

Tú, la poesía, la noche

Solo tú

Si nunca hubieras llegado aquí,

Si, mujer, aquí

La noche, la Soledad, solo yo

Si nunca mis ojos se hubieran lanzado a tì

A tì, mujer, a ti

Tal vez la locura y no tú, mujer

Estaría aquí.

Atrevidos al sol

mirando otros ojos

calma de labios que desaparecen

en ayer

Agonía que sucumbe en el seno

vino esparcido por la tierra

tierra que besa la carne

duda por la que morimos

rabia de siglos desposeídos.

cada palabra es el silencio

que le otorgamos a  la poesía

tristeza incolora del saber

sabiduría ciega que se atreve al amor

sentimiento vacío que no abraza

atardecer de hojas secas en la lejanía.

otra mañana que se entrega a la oración

quejido de poema hambriento

sortilegio ahogado de esperar

moribundo color de la tarde

ahogando en su brillo todo el temblor

misterio atrapado en espuma

lucidez del sol

despojando la sombra

agonía de estrellas tiritando

afán de nombrar la locura

llamado de la noche tragándose

el felino recuerdo de la madrugada

silencio pasajero de la noche

vocablo de la gloria

enmarañando una tragedia

no despiertes que la noche teje su agujero

espacio cómplice por el que estampamos

el vacío sideral

hacia lo irreal

dime luna

cómo transparentar el alma

cómo devolver a la voz el canto

como narrar la sangre escondida

en el remolino de la ansiedad

trafica mi noche en el poema

escrito de carne y sudor

donde retrocede el sol que augura

esta metafísica de luz.

somos otra noche vestida con la tragedia

somnolencia de adioses secos

que transitan la humedad de los labios

testimonio atrevido a lo innombrable

oscura pasión indecisa

matrimonio del fuego con el agua/alma

oscurecer ámbar del brebaje

poción de fuego entre el hielo

marea trashumante de los días

somos un fuego pervertido por el humo

negamos l sal del recuerdo en el ocaso

silencio de noches que no llegan

inda vertido caos, sensual

curso de ríos que trepan

buscando las nubes

locura de suicidio simulando una pasión

se ahoca la vida en el suspiro

tumba donde yace la gloria

tristeza seca que arrebata la esperanza

agua envuelta en u usuro

aquelarre de noches paralizadas

abismo, perdición donde

compongo poesía.

cada palabra es el silencio que le otorgamos a la poesía.

al ritmo de la noche

atravesamos a la poesía

sin medir los pasos que inertes damos

simplificamos en la belleza el espectáculo.

que, mediante la agonía, nos permitimos gozar.

somos un silencio

de soles escondidos

que temen de su luz.

maldad de ríos donde nada la muerte

ángulo de luz que sepulta

el viento

raó que niega

Arnal que desobedece

corazón propagado en el silencio

ritmo rey tato que devora el ciclón

fuego de aire que se trae la poesía.

defender la verdad en estepas

floridas

donde solo el sol

comuña con tu afán

de enceguecer.

somos un cuerpo triste

de batallas inertes

sepultamos el cuerpo

y escondemos la virtud.

toda esta canción que es todo olvido

versos at atrapados. en gateras ausentes

soledad que camina al alba.

del misterio.

ambición de soles nauseabundos

tragedia de poemas atascado s

rincón de poesía en desierto anestesiado.

clamor de ruego

sinfonía perdida

poeta siniestro

quimeras fantasmas

arrebol de fuego

sentenciando citas

encuentro de versos y palabras

malogradas.

raíz de fuego que trafica

con. la marea abuso de poemas que convierten el café en leyendas. ñ

pureza de rio que trae la demencia

ayuno de sangre que hoy trae el temor

rabia de delicia

triste en el horror.

nostalgia que emancipa el camino

misterio de la noche

en tragedia obsoleta.

heridas que le haces al recuerdo

en el aire un agujero a vierto

en la soledad todo coraje muerto.

en la evolución recurrente d e la muerte

un volcán/una canción

desmedida locura que nos atrapa

con la vida

muerte portal indecisa d e la vida

fenómeno de versos convertidos en polvo.

efímero recuerdo de piedra alucinación de versos fríos

que escapan del sol

testimonio de fuego

implantado en las nubes.

soledad que persigue el recuerdo

foto que camina

por la cornisa d e  la nostalgia

imán que adhiere a mí todo el horror.

leyenda de versos atareados

suerte de sueños en eclipse

solitaria historia d eso días

terca soledad de la mañana.

la luz se fuga de tus ojos

la luz esa angustia eterna

sumisión de flores

sombra que deriva en pulcritud

limpieza en la mirada

la tierna sorpresa donde escondemos la vida.

primero somos luego estamos

vivimos ciegos

desnudamos el olvido.

confusión desnuda nostalgia

víctima de ayeres sepelio

opacidad de brisas

risas que caen.

fragmento ignoto luces y palabras

obsequiando miedos el presente

árbol del ensueño

sofisma sideral.

amor de ultrajes humedecidos

polvo que infecta

la maravilla y

el desespero.

ambición de ritos escombros

alucinación de mentiras realidad.

sagaz arrodillarse a la vida

secuencia de imágenes esculpidas

etéreo recuerdo por el andén del tiempo vagando.

canción que invade la tempestad escombro

delito sideral que se traga lo oscuro

festividad, esbeltez cotidiana.

camino a la tragedia, explosión.

canción de tiempo oculta

notas secas advierten horror

risas que muerden los segundos del mar

sirenas muertas al pie d e la madrugada.

versión orate d e la poesía

canto muere

agoniza la dicha

sofisma del viento

verdad escondida en el calendario

mar que besa el cielo y lo abraza

se lo raba en las noches, corren la cortina

todo ese oscuro

encienden desde el interior de su alcoba algunas lucecitas

recién aparecen las estrellas que son como ojos que nos miran.

amargura de cie. Los que copulan

orgasmo que aniquila

pasión contenida

explosión de planetas y universos diseminados en la estepa

del transcurrir.

el aire d e la ciudad ligero

como una exhalación del cielo.